desde el blog de Manuel Delgado
Ha vuelto a ocurrir. Este viernes -26 de marzo- estuve en Valencia invitado por el Teatro de los Manantiales, uno de los pocos lugares en Valencia, y sospecho que en el mundo, donde se puede respirar. Son gente que hace cosas valientes, es decir que se atreve a hacer planteamientos creativos y políticos cuestionadores, es decir en las antípodas de lo que se hace, se piensa y se dice en general. Esta es la página web, con la programación y más informaciones. http://www.teatrodelosmanantiales.com/
Os recomiendo que entréis, no en la página, sino en el teatro por supuesto. La cosa la lleva Chimo Flores. Difícil no identificarse con él y con una tarea casi heroica de mantener un proyecto así
Os recomiendo que entréis, no en la página, sino en el teatro por supuesto. La cosa la lleva Chimo Flores. Difícil no identificarse con él y con una tarea casi heroica de mantener un proyecto así
El caso es que me invitaron a hablar después de la proyección de “El Forat”, ya sabéis el documental sobre el conflicto en el Forat de la Vergonya que hizo Chema Falconetti.
Lo presentaba era una cosa que titulaba “El activismo desactivado. La artisitización de la insolencia en contextos urbanos” y era un poco lo que había presentado en el X Congreso de Geocrítica, con el desenlace del conflicto y la protesta de castigo contra/ante el MACBA, todo ello prolongado a partir de la lectura de la versión catalana del libro de Richard Florida Les ciutats creatives (Columna) y sobre todo del texto que me han mandado mi amigo Georges Yúdice para las actas del encuentro Cultura viva que hicimos en Barcelona este otoño pasado. Todo ello aderezado con una serie de consideraciones de un ejemplo reciente que me ha llegado sobre lo que pasa cuando a las acciones de un colectivo activista las cuelgan de una exposición sobre performances urbanas en un museo y el colectivo se disuelve ante la vergüenza que para ellos supone que lo que hacen sea considerado oficialmente como “expresión artística”.
Lo que pasó después, cuando al final hubo intervenciones, es lo que me pasa siempre y no consigo evitar. Dado que una buena parte del público –y mis propios anfitriones-, seguro que hubo quien se lo tomó como una descalificación del trabajo honrado y creativo de grupos y personas que creen que el arte todavía puede ser un instrumento de agitación y propaganda política.
“Ya está”, me dije. Ya estamos otra vez con esa imposibilidad de expresar un escepticismo que lo más fácil es confundir con una llamada a la pasividad. Yo no puedo evitar se escéptico y mucho más con respecto al eventual papel del arte y los artistas, lo que se da en llamar artivismo y no puedo dejar de decir lo que pienso. Pero no consigo hacer entender que lo que yo pienso es que no es lo mismo que no haya nada que hacer que no haya que hacer nada.
Y todavía más grave. Me encuentro sistemáticamente que hay muchas personas que vienen a una charla mía con la perspectiva de encontrar y escuchar algo parecido a un discurso y no sé cómo decir que no tengo ningún discurso –en el sentido de una postulado coherente y de amplio espectro- y que no tengo ninguna pretensión de que nadie me tome como lo que no quiero ni puedo ser, que es un referente teórico o intelectual de nadie ni de nada. Me duele acabar siempre con la sensación de que quienes acuden a escuchar lo que digo acaben dándose cuenta de que en realidad no tengo nada importante que decir sobre la vida, el mundo o la sociedad en general.
Yo venía allí a compartir una reflexión y explicar unas experiencias, no a proponer una teoría general sobre la acción política y lo que se debe y se puede hacer. Sobre esos asuntos no tengo la menor idea. Es más, ya quisiera que alguien me explicara a mi que se puede y se debe hacer, porque no lo sé.
Fue después, a la puerta del teatro, que me di cuenta plenamente de la dimensión de la catástrofe. Allí me encontré con unas muchachas alguna de las cuales había intervenido al final para hacerme notar que me quedaba todo por decir, lo que en el fondo me pareció un elogio.
Resultó que eran la gente de un colectivo artístico que se llama Idea Destroying Muros y que justo actuaban al día siguiente en la sala con un trabajo titulado “Pornodrama”. No me pude quedar, pero he entrado en su blog y su página web y me he podido hacer una idea de las cosas que están haciendo.
Están en http://www.ideadestroyingmuros.info/ y http://ideadestroyingmuros.blogspot.com/
La foto de arriba corresponde a “Pornoterrorismo”, en el Teatro Padrillo de Madrid, en marzo de 2009.
Entonces me di cuenta hasta qué punto lo que pienso puede ser problemático, no porque se interprete mal, sino porque es difícil de entender y no digamos de compartir un defensa cínica de la implicación política. Está claro que no todo el mundo está predispuesto a complicarse la vida gravemente en causas en las que no cree en absoluto.
Hablando con estas chicas me iba dando cuenta de los peligros que entraña lo que pienso para alguien que no lo piense. Sinceramente, creo que, dejando de lado la dimensión creativa de su trabajo, lo que hacen es absoluta y completamente inútil en el plano político. En cambio, ¡las admiraba y las envidiaba tanto! Hubiera hecho cualquier cosa con tal de animarlas para que continuaran haciéndolo, no a pesar de ser inútil, sino justamente porque lo era. Eso era lo que las revestía de dignidad a mis ojos.
Me dio pena no poder quedarme a verlas, no sólo por ver lo que hacían, sino como señal de afecto y simpatía a ellas y a su trabajo. En cualquier caso, a ver si un día vienen por Barcelona y las invitamos a hacer algo en la Reina. Hablaré con Alba Pons, que las conoce.
Mientras tanto, me permito dedicarles uno de los poemas políticos de Brecht que refleja, mejor que mis palabras, lo que pienso sobre la relación entre lo que vale la pena hacer y lo que hay que hacer, que no son para nada la misma cosa.
Mi hijo pequeño me pregunta: ¿Tengo que aprender matemáticas?
¿Para qué? quisiera contestarle. De que dos pedazos de pan son más que uno
ya te darás cuenta.
Mi hijo pequeño me pregunta: ¿Tengo que aprender francés?
¿Para qué? quisiera contestarle. Esa nación se hunde.
Señálate la boca y la tripa con la mano,
que ya te entenderán.
Mi hijo pequeño me pregunta: ¿Tengo que aprender historia?
¿Para qué? quisiera contestarle. Aprende a esconder la cabeza en la tierra
y acaso te salves.
¡Sí, aprende matemáticas, le digo,
aprende francés, aprende historia!
Lo que pasó después, cuando al final hubo intervenciones, es lo que me pasa siempre y no consigo evitar. Dado que una buena parte del público –y mis propios anfitriones-, seguro que hubo quien se lo tomó como una descalificación del trabajo honrado y creativo de grupos y personas que creen que el arte todavía puede ser un instrumento de agitación y propaganda política.
“Ya está”, me dije. Ya estamos otra vez con esa imposibilidad de expresar un escepticismo que lo más fácil es confundir con una llamada a la pasividad. Yo no puedo evitar se escéptico y mucho más con respecto al eventual papel del arte y los artistas, lo que se da en llamar artivismo y no puedo dejar de decir lo que pienso. Pero no consigo hacer entender que lo que yo pienso es que no es lo mismo que no haya nada que hacer que no haya que hacer nada.
Y todavía más grave. Me encuentro sistemáticamente que hay muchas personas que vienen a una charla mía con la perspectiva de encontrar y escuchar algo parecido a un discurso y no sé cómo decir que no tengo ningún discurso –en el sentido de una postulado coherente y de amplio espectro- y que no tengo ninguna pretensión de que nadie me tome como lo que no quiero ni puedo ser, que es un referente teórico o intelectual de nadie ni de nada. Me duele acabar siempre con la sensación de que quienes acuden a escuchar lo que digo acaben dándose cuenta de que en realidad no tengo nada importante que decir sobre la vida, el mundo o la sociedad en general.
Yo venía allí a compartir una reflexión y explicar unas experiencias, no a proponer una teoría general sobre la acción política y lo que se debe y se puede hacer. Sobre esos asuntos no tengo la menor idea. Es más, ya quisiera que alguien me explicara a mi que se puede y se debe hacer, porque no lo sé.
Fue después, a la puerta del teatro, que me di cuenta plenamente de la dimensión de la catástrofe. Allí me encontré con unas muchachas alguna de las cuales había intervenido al final para hacerme notar que me quedaba todo por decir, lo que en el fondo me pareció un elogio.
Resultó que eran la gente de un colectivo artístico que se llama Idea Destroying Muros y que justo actuaban al día siguiente en la sala con un trabajo titulado “Pornodrama”. No me pude quedar, pero he entrado en su blog y su página web y me he podido hacer una idea de las cosas que están haciendo.
Están en http://www.ideadestroyingmuros.info/ y http://ideadestroyingmuros.blogspot.com/
La foto de arriba corresponde a “Pornoterrorismo”, en el Teatro Padrillo de Madrid, en marzo de 2009.
Entonces me di cuenta hasta qué punto lo que pienso puede ser problemático, no porque se interprete mal, sino porque es difícil de entender y no digamos de compartir un defensa cínica de la implicación política. Está claro que no todo el mundo está predispuesto a complicarse la vida gravemente en causas en las que no cree en absoluto.
Hablando con estas chicas me iba dando cuenta de los peligros que entraña lo que pienso para alguien que no lo piense. Sinceramente, creo que, dejando de lado la dimensión creativa de su trabajo, lo que hacen es absoluta y completamente inútil en el plano político. En cambio, ¡las admiraba y las envidiaba tanto! Hubiera hecho cualquier cosa con tal de animarlas para que continuaran haciéndolo, no a pesar de ser inútil, sino justamente porque lo era. Eso era lo que las revestía de dignidad a mis ojos.
Me dio pena no poder quedarme a verlas, no sólo por ver lo que hacían, sino como señal de afecto y simpatía a ellas y a su trabajo. En cualquier caso, a ver si un día vienen por Barcelona y las invitamos a hacer algo en la Reina. Hablaré con Alba Pons, que las conoce.
Mientras tanto, me permito dedicarles uno de los poemas políticos de Brecht que refleja, mejor que mis palabras, lo que pienso sobre la relación entre lo que vale la pena hacer y lo que hay que hacer, que no son para nada la misma cosa.
Mi hijo pequeño me pregunta: ¿Tengo que aprender matemáticas?
¿Para qué? quisiera contestarle. De que dos pedazos de pan son más que uno
ya te darás cuenta.
Mi hijo pequeño me pregunta: ¿Tengo que aprender francés?
¿Para qué? quisiera contestarle. Esa nación se hunde.
Señálate la boca y la tripa con la mano,
que ya te entenderán.
Mi hijo pequeño me pregunta: ¿Tengo que aprender historia?
¿Para qué? quisiera contestarle. Aprende a esconder la cabeza en la tierra
y acaso te salves.
¡Sí, aprende matemáticas, le digo,
aprende francés, aprende historia!
18 comentarios:
Le contesté en su blog. Esto:
Tres personas se suben a un escenario. Sobre él cuestionan (mediante versos, imágenes y acciones) que los géneros son una falacia, que las mujeres asignadas así en su nacimiento pueden tener una sexualidad desbordante, que la violencia no es exclusiva de la masculinidad, que un cuerpo desnudo puede transmitir muchas más cosas que las palabras, que la eyaculación femenina existe, etc.
Alguien está entre el público. Cuando llega a casa decide que ya no es hombre ni mujer. Eso es político. Otra persona de la audiencia piensa que nunca más volverá a sentirse avergonzadx de su cuerpo. Eso es político. Otrx que la sexualidad no ha de ser una cruz y que puede convertirse en un arma de empoderamiento del propio cuerpo. Eso es político.
Te recomiendo que veas la performance de VideoArmsIdea y una servidora (pornoterrorista) en Bourges (el vídeo tiene mejor calidad que la del Teatro Pradillo y es la misma performance) y después, si sigues pensando que lo que hacen (hacemos) es completamente inútil en el plano político, lo digas con conocimiento de causa.
Esta performance en concreto pone en práctica parte de la teoría queer, las teorías de Beatriz Preciado sobre el género, lo protésico, la testosterona, también las teorías de Foucault sobre el sadomasoquismo como forma de demostrar que el poder es sólo un juego, etc. La práctica (artística o no) de las teorías es precisamente lo que las valida, lo que les da su "utilidad".
A mí personalmente me parece políticamente muy práctico hacer que la gente que acude a ver una performance así pueda llegar a replantearse cosas que ni siquiera había imaginado que podían ser cuestionadas.
Decir que lo que hacemos es inútil en el plano de lo político es prácticamente afirmar que nada será realmente relevante en ese aspecto, escribir no lo será, ni manifestarse (qué es el arte sino una manifestación?), ni siquiera "hacer política" lo será. Yo encantada me saldría a la calle a poner bombas si no fuera porque me considero más "útil" fuera de la cárcel que en ella.
Un saludo,
Diana.
Aquí el link para que puedas ver la performance:
http://pornoterrorismo.com/mira/performancevideo/testo-yunkie-party/
me encanto tu respuesta y me la robo
Hay una parte de mundo en devenir que siempre ha sido invisibilizada o silenciada.
Ocupar el espacio publico o privado de cualquiera manera es importante se el fin es visibilizar lo que siempre ha sido considerado lo monstruoso.
Visibilizar los subjetos que no encajan en nada es visibilizar los miedos de quien escluye estos subjetos. Desde aquí cada unos tendría que cuestionarse su sentido y su utilidad.
Siempre nos han dichos que somos inútiles, eso no nos sorprende para nada, reafirma lo que ya sabemos, y reafirma la necesidad de seguir en lo que hacemos.
De toda forma entiendo el discurso de Manuel Delgado, aunque se me recuerda el discurso del Heroe Caído. No me reflejo en eso pero históricamente es un hecho.
Por suerte que ha caído...Nosotrxs somos todavía un devenir y por suerte nos tenemos cargado en las espalda el fracaso de una época.
No creo en la revolución de un sistema, eso es absurdo creerselo, también porqué es una idea anacronistica.
Creo en una red de gente que habla, hace relativamente poco comparado con la historia, discursos que aparentemente son inútiles pero que se están moviendo desde dentro, desde el lenguaje, desde el cuerpo,
distorsionando todo los valores que hasta ahora fundaban esta mierda de sociedad.
Es lento pero necesario.
Agradezco la conferencia de Delgado, su ilusión y su cinismo pero no le hago ni puto caso...como nos dijo el.
Y sigo con los nuestros reafirmándonos en su articulo.
Mill besos Diana.
estas dos respuestas son voz y palabras de muchas más, reveniendo a la matemática, gracias por existir
Lara, Paris
yo no sè, me quedo con la sensaciòn de haber escuchado una persona que una vez delante a unas personas que lo escuchan inevitablemente tiene poder y ya esto es un discurso.
me quedo con la sensaciòn violenta de escuchar dos horas de cinismo que puedo respetar pero no compartir.
lo siento pero como dije en mi intervento el problema del no-discurso de Delgado es que a mi ver me pareciò pobre de analisi ya que soy totalmente de acuerdo cuando dice que la lucha no puede ser pagada por el estado, pero me queda corto cuando no analiza desde ninguna perspectiva el sujeto que lucha, no es lo mismo ser un baron blanco etero occidental y culto que una mujer o un nino o un trans o una puta o un negro, un maricon en iran o una bollera.
puedo comprender cuando dice que nuestro trabajo artistico es politicamente inutil desde una perspectiva anti kapitalista, donde la utilidad es el fin, puedo comprender la ironia la confusion, lo que sea
sin embargo me parece todo tan relativo y tan violento que durante la conferencia màs de una vez pensè en matarlo. No es maldad pero paso del esceptisismo, que el arte en la mayoria es al servicio del poder, desde siempre, no es una novedad, pero que que haya una minoria que resiste pues tambien es verdad y empiezo a ser cansada de tantas palabras sobre la imposibilidad de una acciòn.
me quedo con la micropolitica de la lucha, a partir de las relaciones para subvertir cuerpos, normas, sexualidades, empiezo a odiar el sobra- poder occidental de la palabra.
un besazo y viva el kalasnikof
kiara
hola kora, leo y vuelvo a leer tus comentarios y se dà el caso que estoy in Italia en estos diás.
reflexiono sobre lo que comenta porque son preguntas que me estoy planteando yo también:
no se trata de querer estar en el mercado, tampoco de ocupar un discurso, sino de crear alternativas y nuevos espacios de debates y confrontación o si quieres el utipico sueño de cambiar el mundo, que seré romantica pero siguo imaginando algo diferente.
yo lo vivo como un conflicto no como fama, a bailar. en estos dias en Italia he reflexionado mucho y de verdad siento la violencia del poder aquí más que en España, no creo en el silencio, tampoco en el no estar como forma revolucionaria.
Veo aqui esta actitud como forma de soprevivencia, y creo que por el contexto social y el momento historico hay que aprovechar la situación española.
no sé quien eres y si este debate, ver el pornodrama crea este intercambio de ideas ya para mi es un crear alternativa. Me encantaria que veniera Rita Barbera, son años que intento ir a una de sus fiestas bolleras, te confieso que sueño con fistearla hasta reventarle el coño de placer.
lo que quiero decir es lo que tu llama nosotras o nosotros yo no lo comparto, no sé quién eres y tu no sabes quien soy yo, el ser más publica por hacer una performance o decir publicamente una opinión no implica nada más que compartir un momento o unas emociones, sin embargo espero encontrarte en valencia para seguir abriendo esta red que se esta creando, es verdad es pequeña, pero dias tras dias se hace mas amplia y compleja.
sobre lo de follar entento hacerlo lo mejor que puedo, y sobre todo de compartirlo, y experimentarlo y vivirlo como estrategia subversiva.
soy una buena amante sabes... es un piropo sí!!!
sobre la simplificación que haces de los discursos feministas de genero y queer pues creo que habría que hablar más "¿Cómo se puede decir, qué después de ver una Performance, uno o una, llega a casa, y decide que ya no es hombre, ni mujer?, ¿y qué?, ¿para qué?, ¿es que va a ser algo mejor que eso?"
pues personalmente creo sí, creo se puede ser mejor que esto, no para nada sino porque la ignorancia es una forma de control y no una justificación. Por esto que creemos en la difusión de otros discursos. Estoy flipando aqui in Italia con la ausencia de 30 años de cultura, no hay libros, no estan traducido, no existen.
y para mi la rabia crea, es un motor y jamas quiero contenerla, 25 años de represión en una dictatura mediatica me han enseñado que las explosiones de rabia no son politicamentes corectas,solo el poder puede permitersela, sinceramente prefiero equivocarme 1000 veces a la umildad catolica de piensa ante que hablar y luego calla.
y finalmente creo que todo tenemos poder, la diferencia està en como decidimos usarlo.
un besazo kora
este mi mail para tomar un café!!!
chiara.videoarmsidea@gmail.com
hasta pronto
k
Me parece alucinante que una persona que dice de sí misma que es "muy normalita" sea precisamente quien venga a decirnos que lo que hacemos no vale de nada y que la única revolución está en el silencio... Ese es justo el discurso de cualquier persona que trata de desmoralizarnos, de deslegitimar nuestro esfuerzo y nuestro trabajo, de jodernos.
Tú serás muy normalita, Kora, una adaptada social y por eso te puedes tomar la libertad de decir que lo mejor es callarse, supongo que no tendrás nada de lo que quejarte. Lo siento, pero no es nuestro caso.
Y creéme (cualquier libro de Historia te lo dirá también), ninguna revolución se ha hecho sin hacer nada, ninguna revolución la propiciaron personas que no tenían nada que decir.
Estoy hasta el coño de que las personas desidiosas y conformistas vengan a darnos lecciones de cómo conducir nuestro futuro, de cómo armar revoluciones. Iros a tomar por culo. Quedaros en vuestra mierda de escepticismo, en vuestras poltronas de normalidad. No vais a conseguir callarnos porque a nosotrxs no nos convencen las golosinas del sistema.
Queda mucho por decir y mucho por hacer. Kora, me parece una basura que digas que ya está todo hecho y dicho. En qué puto mundo vives? Supongo que debes ser la persona más feliz del mundo o que el único sentido de tu vida es seguir siendo "normalita". Vete al carajo con tu normalidad, la revolución, si hemos de hacerla, la haremos precísamente para que personas como tú no puedan jamás tomar decisiones sobre nuestras vidas.
Al carajo, joder!
Tus "pildoritas", querida Cora, son puta mierda y no me vale que te retractes, lo primero que se dice es lo que verdaderamente se piensa (aquí dejo algunas para que leas tus palabras):
- Los grans y las grandes se borraron del mapa, porque EL SILENCIO lo llevaron tan lejos que se suicidaron como Alejandra Pizarnik, Sylvia Plath, o cómo Kafka.
- ¿Cómo se puede decir, qué después de ver una Performance, uno o una, llega a casa, y decide que ya no es hombre, ni mujer?, ¿y qué?, ¿para qué?, ¿es que va a ser algo mejor que eso?,¡qué bien!,¡qué éxito!
- pero cuando me inunda la rabia, primero me lo miro conmigo misma, porque aquí estamos todos igual, y todo transcurre en esto que se llama Vida, que no se sabe muy bien que es.
- no creo que tenga que ser tabú ser normal.
Ahí están tus palabras querida. Te falta mucho para llegar a comprender que las cosas que dices forman parte precisamente de lo que profundamente odiamos y contra lo que luchamos y lucharemos siempre, aunque parece que tú las dices por decir, sin tener ni idea de lo que implican.
Porque la Pizarnik, la Plath y Kafka no se suicidaron: los suicidó la mierda del mundo. Lee sus obras, ahí lo dicen todo bien claro (ahora estoy pensando en "El proceso", lo puedes descargar gratis aquí: http://www.librosgratisweb.com/libros/el-proceso.html).
Acerca de tu segunda "pildorita"... no sé, lee un poco de teoría queer, puedes empezar también por la Historia de la Sexualidad de Foucault o pegarte un viajecito a Afganistán y observar si los géneros no son uno de los peores inventos de la puta humanidad.
Bueno y tu "aquí estamos todos igual", eso ya me mata. Igual???
La última la dejo por imposible. La normalidad nunca fue tabú y nunca lo será. Dime de qué tienes que esconder tu normalidad, quién te reprime por ser normal, quién te encarcela, quién te mata.
Es que esto ya es el puto colmo, que vengan lxs normales a decir que lxs discriminamos...
PD: lo de que intenet es otra golosina del sistema... en fin, yo no he tenido que agachar la cabeza ni modificar ni un sólo acto de mi conducta para tener internet. No sería así si quisiera comprarme una casa (te recuerdo que el derecho a una vivienda digna es un derecho constitucional), si quisiera tener un niño, si quisiera tener las comodidades de salir de la precariedad. Seguramente si aceptara esas golosinas del sistema no estaría aquí escribiendo ahora, estaría en mi trabajo de 8 horas preocupada por pagar la siguiente letra de la hipoteca.
A eso me refería con las golosinas del sistema, que premia a quienes obedecen y castiga a quienes no, que beneficia a "lxs normales" y perjudica a lxs monstruxs como nosotras.
Intenet de momento es relativamente libre aunque nuestra maravillosa ministra de cultura quiera cambiarlo para que la cultura nunca más se separe de la economía. Aquí te dejo una de sus "pildoritas" (muy bien respondida opr Eduard Punset)http://www.youtube.com/watch?v=lefG4P0_jRk
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